Translate

sábado, 28 de septiembre de 2013

Segunda etapa: Puentedeume-Miño


     Hoy hicimos la segunda etapa del Camino. Empezamos tarde, a las dos, porque uno de los peregrinos tenía trabajo. Esperamos en el bar Zas de Puentedeume tomando una cervecita. Amenazaba lluvia y llovió, pero también hizo sol a ratos. Tuvimos un día muy bueno, sin calor. Lo justo para caminar y la lluvia en ningún momento fue mucha. 




     Cuando comienzas esta etapa, tienes que subir, cruzando el pueblo hasta Campolongo. Es tremendo. Subes y subes una cuesta muy empinada. Pero cuando ya no puedes más, estás arriba. Creo que influyó sobre todo, para subir tan contentos, el que no hiciera calor y el recuerdo tan horrible del sábado anterior. En seguida paramos a comer nuestro bocata, algunos frutos secos y agua. Todo muy frugal.




     Entonces comienza la bajada a Miño. Parece que va a ser corto pero no lo es tanto. Sin embargo, el camino es bonito. Hay bosques de castaños, robles y eucaliptos. Hay abundantes helechos y muchas hojas de árboles por el suelo. Es todo mucho más agradable que el día anterior. Creo que influye, no sólo la temperatura, sino también la luz otoñal, la suave llovizna que nos refresca... Es "mucho más Galicia". Es que el otoño a nuestra tierra le sienta muy bien. 




     Entre tanta bajada, nos encontramos con una subida muy pendiente. Es un camino forestal, hay cazadores de corzos que nos saludan muy amables. Pobres corzos. Una vez pasada esta pendiente, casi todo es bajar. Claro, vamos hacia el mar. 

     Miño ha crecido mucho. Hay muchos nuevos pisos que no recuerdo. Es muy distinto del Miño de hace veinte años, pero ¡qué ría! Enfrente está Sada. Con la luz de la tarde está todo muy bonito. Ya veis que hoy no pongo pegas. Es una etapa muy agradable. También es cierto que hemos hecho muchos menos kilómetros. Llegamos a Miño hacia las seis de la tarde. Dudamos si continuar pero comienza a llover y pensamos que Betanzos puede esperar al sábado que viene.




     Así sin prisas ni agobios, con muy buen rollo, hemos hecho esta segunda etapa que ha sido una delicia. Un descanso para los pies después de la anterior. Tomamos un café y charlamos y reímos mientras organizamos la salida de la próxima semana. Será algo más larga pero todos nos sentimos optimistas. La de hoy, más corta y sin calor, nos ha dejado descansados y animados para la siguiente. No me duelen los pies. No me duele nada. Volvemos por la costa hasta Puentedeume, donde cogemos la autopista. Esta carretera de la costa es preciosa. Merece la pena. Hemos pasado un día estupendo.



6 comentarios:

  1. Me alegro mucho. Animo, Santiago está más cerca... Bss y buen camino.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Cuqui. Esta jornada tranquila nos ha puesto las pilas a todos. La semana que viene avanzaremos, si Dios quiere, más que ésta. Besos.

    ResponderEliminar
  3. Ana enhorabuena por el blog y`por el camino. te escribí la semana pasada pero parece que no lo mandé bien y no lo has leído, te mandaba unos pequeños trucos para los piés y es simplemente vaselina, por la noche y por la mañana, te aseguro que haga calor o frio no te enteras y llegas feliz..Buen camino!!!!! y un beso. (el potaje deliciussss)

    ResponderEliminar
  4. Ana, sí me llegó tu mensaje y te contesté. ¿No lo viste? Tus consejos me vinieron genial. Llevé los pies bien untados en crema y, efectivamente, no hubo ampollas. Me alegro de que te gustase el potaje. Un beso muy grande.

    ResponderEliminar
  5. Enhorabuena por todo, Ana. Lo que me ha hecho sonreir es que digas Puentedeume....se ve que somos de otra época.... Ahora los forasteros y los jóvenes dicen Pontedeume. Bueno, jóvenes seguimos siendo... Un besito.... Ahhh estaba buscando una receta de bizcocho de pera.... Bicos desde Madrid.

    ResponderEliminar
  6. Muchas gracias. Mi padre siempre decía Puentedeume y Las Puentes... Será porque no era gallego. Es verdad que antes hablábamos distinto. Un beso.

    ResponderEliminar