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jueves, 12 de noviembre de 2020

Pasta con gulas y trigueros


   Queridos amigos, por fin estoy de vuelta en el blog. He tenido unas semanas complicadas, se me ha estropeado el ordenador y he ejercido un poco de abuela. Total, que me ha faltado la oportunidad de sentarme a escribir recetas. Esta que os traigo hoy la hice en el confinamiento y después la he repetido porque es fácil y resulta muy rica. Además, podemos tener todo unos días en nevera y congelador, por lo que es de las recetas que nos convienen estos días infaustos. Vamos ya con lo que necesitamos:

250 gramos de pasta (que puede ser la que nos dé la gana)

Un puñado de espárragos

Un puñado de bacon

Medio paquete de gulas (de los dos que vienen)

200 ml de nata líquida

Queso que funda bien al gusto

Aceite, sal y pimienta



   Es facilísimo. En una sartén ponemos a dorar los espárragos en dos cucharadas de aceite de oliva. Yo para esto los compro congelados, ya cortados, que son baratitos, y la bolsa me da para varias recetas. Los compro en Mercadona. Bien, incorporamos el bacon y dejamos que todo se dore bien doradito, que no negrito. Añadimos las gulas un minuto y ya podemos poner la nata y salpimentar al gusto, teniendo en cuenta que gulas y bacon son salados.



    Lo último es añadir el queso; yo puse una mezcla que nos gusta mucho y se funde muy bien. Las hay en cualquier supermercado. Para mi gusto no hace falta mucho queso, un puñadito. Queda una salsa muy melosa con unos tropezones ricos. 

   Os dais cuenta que tenemos que ir a la vez cociendo la pasta en agua con sal, siguiendo las instrucciones del paquete, según que pasta hayamos escogido. Esto es como siempre. Yo suelo poner la pasta en la sartén con la salsa, remuevo bien y ya paso a la fuente en que voy a servir. 

   Es de esas recetas rápidas, para comer o cenar, que todos se quedan contentos y está muy buena. Para cualquier ocasión. Aquí queda la receta. Ya servida, se puede añadir un poco de queso rallado en polvo, eso es para gustos.

   Contaros que sigo leyendo, he terminado estos días "El color púrpura" que me ha gustado mucho menos que la película -que ya es raro- y también "Lady Ludlow" de Elizabeth Gaskell que me ha gustado pero bastante menos que "Norte y Sur" o "Cranford" que es deliciosa. Sigo con mis cosas, cuando me dejan y voy tirando. Un poco asustada con el invierno que viene pero esperanzada. Siempre hay que tener esperanza de un mundo mejor, ¿no creéis? Os mando a todos un codazo... ¡perdón! Un muy fuerte abrazo.