Translate

lunes, 30 de enero de 2017

Tortilla con jamón y queso


     Últimamente estoy perdiendo algo de memoria. Voy a poner una entrada y, de pronto, me doy cuenta de que ya está en el blog. ¡Me da una rabia! Menos mal que siempre tengo recetas y experimentos para contaros. Esta tortilla, más o menos parecida, salió en mi Facebook y decidí hacerla. Era, en realidad, un revuelto pero yo decidí "atortillarlo" porque me apeteció más. Queda muy rica y es de esas cosas de hacer rápidamente. ¿Qué necesitamos?

7 u 8 huevos grandes
4 patatas hermosas
Una cebollita
3-4 lonchas de jamón cocido o york
3-4 lonchas de queso corriente 
Aceite y sal

     En el vídeo cortaban las patatas finas, como para tortilla, pero en tiras. No sé si se nota en la foto pero les hice caso. Estas patatas las freímos en la freidora. Ligeramente doradas. El jamón y el queso se cortan en tiras. Si queréis hacer cuadraditos, no hay problema. Pasamos el jamón por la sartén que hemos engrasado ligeramente. Después... batimos bien los huevos y los salamos al gusto. Incorporamos las patatas, la cebolla, el jamón dorado y el queso. Removemos bien para que no se quede todo el jamón "arrejuntado" en un lado. Y bueno, procedemos como para cualquier tortilla de patatas: Un par de minutos a fuego medio-alto por cada lado, a según la cocina. A mí me gusta jugosa sin exagerar... Y nos queda una tortilla muy rica y tampoco demasiado diferente de la tortilla normal. Me olvidé deciros que la cebollita la corto fina y la pongo sobre las patatas en la misma freidora. 


     Pues hasta aquí la entrada. ¡Modernidades! que diría Carmen. A todos nos ha encantado. El jueves o el viernes tengo intención de subir varias recetas de muffins, antes les llamábamos magdalenas, para aprovechar ahora que llevamos abrigo y no se ven las lorzas. Hasta entonces os deseo una muy feliz semana. Gracias a todos por leerme. 

viernes, 27 de enero de 2017

Bizcocho de plátano y lima


     Ya sabéis que me encanta hacer bizcochos. Es una cosa graciosa porque me relaja mucho. Este lo hice una tarde para merendar con uno de mis hijos. No suelo merendar pero me llevó la vida... El bizcocho es el de yogur, al que añadimos un plátano pequeño y el zumo de media lima y una pizca de canela. Yo iba a hacerlo como suelo y resultó que no me funcionaba la batidora de varillas -momento dramático-. Bueno, pues lo que hice fue batir todo por las buenas:

Tres huevos
Un yogur
La misma medida de aceite
Dos medidas de azúcar
Tres medidas de harina
Tres cucharillas de levadura royal
Una pizca de sal
Canela al gusto 
Un plátano pequeño
El zumo de media lima



     Batí todo junto y lo puse en un molde engrasado y enharinado. Espolvoreé avena y azúcar por encima. Me creo, o no, que la avena es sanísima. Bueno, pues al horno a 175º unos 35-40 minutos. Veis entre estas dos fotos que subió bastante bien. Fue muy correcto. 



     Aquí debajo podéis ver el aspecto de la miga. Yo creo que así batido queda menos esponjoso pero estaba realmente rico, de textura y de sabor. Algo menos airoso... Los aromas muy ricos, tropicales, y con el té, resultó un refrigerio la mar de agradable. Eso sí, esto de merendar no puede ser... Nada más. Os deseo a todos un buen fin de semana.


lunes, 23 de enero de 2017

Pescado al horno clásico

   
     Lo primero de todo es deciros que estos pescados, que fueron peces en vida, los cocinó mi marido. Lo segundo es que eran de piscifactoría. Lo tercero es que estaban realmente exquisitos. ¿Cómo los hizo? Pues de la forma tradicional, como hacíamos los besugos cuando se podían comprar. 

     Eran una dorada y una lubina de ración. Vamos doradita y lubinita. Hay que comprarlos frescos, y limpios de tripas y escamas. En una fuente de horno pondremos unas patatas fritas con cebolla. En plan tortilla de patatas pero menos doradas. 


     Sobre las patatas van los pescados. Hay que salar las patatas y el pescado por dentro y por fuera, claro. Bañamos con un chorro de aceite y otro de vino gallego. Al menos que sea un vino blanco y rico. Espolvoreamos con pan rallado los pescados y rodeamos de tomates cortados al gusto que también salaremos. Mi marido puso perejil. También se pueden poner unas ruedas de limón o un chorro de zumo, si gusta. Nosotros nos abstuvimos.


     El reportaje gráfico es algo repetitivo pero ¡en fin! continuemos... llevamos al horno a 200º una media hora. Esto es en mi horno, quizás en otro más nuevo sea algunos minutos menos. 


     Yo soy partidaria de repartir el pescado separando los lomos y sirviéndolo lo más limpio de espinas que se pueda. Esto es para que se desperdicie lo menos posible. El pescado está caro. 



     Las patatitas y los tomates con el juguito que suelta el pescado son de las cosas más ricas que hay. Para alguno de mis hermanos, preferibles al propio pescado, que es indispensable para que las patatas adquieran ese sabor tan bueno. 


     Y nada más aparte de que estos pescados son chicos, más bien de ración, y, por esa razón, salen algo caros si hay muchos comensales. Si me preguntáis si me gusta mas la dorada o la lubina, os tengo que decir que me encantan las dos hechas de esta manera. No soy maniática. Ya sabemos que es más rico el pescado de mar que el de granja, que le llamo yo, pero también pasaba con los pollos y, al fin, nos hemos acostumbrado. Además, según dicen, el pescado de piscifactoría no tiene anisakis porque su alimentación está muy cuidada. Supongo que será cierto. Hasta aquí esta receta que os aseguro que estaba de chuparse los dedos. Buenas tardes a todos.





jueves, 19 de enero de 2017

Solomillo oriental y tal


     Como ya no sé qué hacer de comida y tampoco quiero que los menús sean muy calóricos, he vuelto a echar mano de las hortalizas. Menos mal que me encantan. Hace tanto frío que apetece comer a lo bestia pero todos los días no puede ser... Así que me acordé de los chinos y las hortalizas en tiras y decidí cocinar el solomillo de cerdo en este plan. Lo que necesitamos es:

Un solomillo de cerdo
Una cebolleta
Un pimiento verde
Una zanahoria
Un puñado de setas de cardo
Dos cucharadas de aceite
Sal y pimienta
Salsa de soja
Una cucharada de miel


     En una tartera doramos a fuego medio-alto el solomillo. Cuando va cogiendo color incorporamos las hortalizas para que también se doren. Salpimentamos, ponemos un chorro de soja -esto es un poco al gusto- y una cucharada de miel sobre la carne. Dejamos hacer con la tapa puesta una media hora. Quince minutos por cada lado. Estos guisitos sueltan agua pero si veis que se seca ponéis un chorro de agua... Porque el vino cambiaría el sabor.  

     Lo acompañamos con un arroz basmati -o arroz en blanco normal- y yo lo he adornado con mango. Esta idea a mi marido le encantó pero uno de mis hijos dijo que no pegaba ni con cola. Cada uno tiene su gusto, ya se sabe. No es mala idea llevar la salsa de soja a la mesa por si alguno quiere ponerle más.

     Hasta aquí esta receta, bastante sencillita que, la verdad, estaba muy rica. Esto de comer cada día empieza a ser cansino... Sobre todo pensarlo. Buenas noches a todos. 


lunes, 16 de enero de 2017

Croquetas de zanahoria y espinacas


     Esta receta se parece a otras que ya he puesto. Es, en realidad, una combinación de varias. Sin embargo, me parecía indispensable poner hoy una receta de croquetas pues he leído que hoy es "el día internacional de las croquetas" o cosa parecida. Yo adoro las croquetas así que tendré que festejar este acontecimiento a partir de hoy. La cosa es no olvidarlo. Lo que me ayudará a recordarlo es que hoy es, además, el aniversario de este humilde blog. ¿No os parece magnífico que coincida con el día internacional de las croquetas? A mí sí. Es una coincidencia divina. Esa es la razón de las flores, dos de mis favoritas: hortensias y lisianthus. Vamos con las croquetas y ya hablaremos del aniversario después. 


     Para hacer estas croquetas necesitamos:
Una cebollita
Una zanahoria grande
50grs de harina
Medio litro de leche 
Dos quesitos
Espinacas en porciones
Aceite y sal
Huevo y pan rallado

     Comenzamos por el principio: doramos a fuego suave la cebolla y la zanahoria picadas más bien menudas. En la otra receta ponía zanahoria rallada pero hoy he hecho cuadraditos para no sacar el helicóptero que es muy aparatoso. Una vez doradas ponemos la harina y dejamos hacer a fuego suave varios minutos. Añadimos la leche y removemos bien -yo esto lo hago fuera del fuego-, llevamos a ebullición y removemos mientras se forma la béchamel. Seguimos removiendo a fuego suave unos veinte minutos. Al final, incorporamos los quesitos y dos porciones de espinacas. Dejamos que todo se una y quede una masa homogénea y fina. Por supuesto hay que salar.


     Queda, como veis, una bechamel bicolor la mar de mona. Sobre todo, suave y rica, que es lo que más nos interesa. 



     Dejamos que se enfríe y las rebozamos en huevo y pan rallado con ayuda de dos cucharas soperas y de algo de paciencia. Quedaron algo claritas pero yo creo que depende mucho del pan rallado que utilicemos. 



     Nosotros tomamos las croquetas en plato combinado porque a mi marido le encantan así. Yo me he acostumbrado y también me chiflan con la yema del huevo frito. Cuando le pregunto a mi hijo que tal quedaron, me contesta con una palabra que empieza por C y no voy a repetir aquí (debe de ser la lengua de Mordor).




      Y ahora comentar un poco más el tema del aniversario del blog... Bueno, ¿qué os voy a decir? Son ya cuatro años que me han parecido cortos. Si empecé fue porque me insistieron mis amigas. No sabía si hacerles caso, si el blog gustaría, si sería de utilidad... Hoy, pasadas tantas cosas, creo que todo ha sido positivo. Es útil para familiares que están lejos y para muchos amigos que me comentan que lo siguen. Me ha llevado a conocer a gente nueva y recibir cariñosos mensajes de lectores que de otra forma nunca habría podido soñar,... Y también hay quien lo considera un blog divertido. Son cosas asombrosas que una sólo descubre sobre sí misma con ayuda de los demás.

      Os agradezco muchísimo que me leáis y confiéis en mí criterio cocineril. Yo procuro hacer de la cocina algo fácil y divertido. Es, con mucho, lo que prefiero de mi trabajo de ama de casa. No quiero ser pesada pues ya os conté que últimamente el blog va muy bien y tengo muchos más lectores. Muchos de Estados Unidos. Yo agradezco todo. Mis amigas de Ferrol también me leen y comentan. Esto tiene gran importancia para mí pues son las que me animaron más. Yo andaba con el móvil lleno de fotos de platos sin decidirme a abrirlo y me decían: "Ya estás tardando". Pues sí, a algunas a veces nos hace falta un empujoncito. Esta entrada se la dedico muy especialmente a mis queridas amigas que son maravillosas. A todos mil gracias y buenas tardes. 


jueves, 12 de enero de 2017

Resumen Navidad 2016-2017




     No quería empezar a poner nuevas recetas sin enseñaros antes algunas de las cosas que hice este año por Navidad. No es que haya cocinado muchísimo ni muy variado, pero todo salió muy rico y yo creo que fue bastante sencillo. En la primera foto podéis ver el Roscón de Reyes con la misma receta del año 2016. Quizás me quedó un poco menos tierno... puestos a ser críticos; No obstante, no me quejo. Estaba muy bueno y no me dio mucho que pensar. No creáis que lo hago sin miedo. Siempre pienso: pero... ¿quién me mete a mí en estos berenjenales? Son berenjenales agotadores después de una tarde de multiples y misteriosos recados... Como siempre digo: hacerlo en casa, verlo levar y oler el resultado según sale del horno, me satisface enormemente. Comprarlo, pues también es genial. Faltaría más.


     El día de Navidad lo festejamos, como os había dicho con: consomé, vieiras, langostinos y pularda asada. Fue una comida realmente rica y nada complicada. Mi marido me ayuda siempre, lo cual no es poco. Este año hizo él el consomé y le quedó exquisito. De las vieiras... pues no hay foto.


     La pularda también quedó estupenda. Quiso quemarse y le faltó poco. Otro año la cubriré con albal la segunda hora de horno. Con todo, estaba realmente buena. 


     En estas dos fotos podéis ver parte de la mesa y la ración de pularda con sus patatitas, setas y parte del relleno. Esta receta ya está en el blog y es muy sencilla y rica. También hice un chutney de manzana. Es que esto de cocinar es un vicio; nunca se acaba. 



     El relleno, que ya expliqué que es sin deshuesado previo, queda muy rico y, al dorar antes las salchichas, no quedan con color blancurrio de salchichas cocidas. Yo no sé si esta receta me la inventé o la saqué de algún recuerdo, lo que sí puedo decir es que no puede ser más fácil.


     Y aquí debajo podéis ver la masa del roscón después de pasar la noche a la fresca -en la nevera-. No tengo queja de lo bien que se portó. 


     El decorado del roscón... demasiado sencillo para alguno de mis hijos, que es un larpeiro, y del gusto de los que no son partidarios de las frutas escarchadas. Para que veáis que es verdad que lo hago... (es broma).

     Y el brunch de Reyes que con los años se va convirtiendo en un desayuno en dos fases. En esto nos vamos pareciendo a los hobbits y el día de Reyes desayunamos un par de veces. 


     Aquí queda este resumen algo incompleto. Os aseguro que es complicado hacer tanta foto. Por supuesto, comimos más cosas y no todas en casa. Yo os cuento lo que cocinamos en mi cocina, nada más. De los kilos no vamos a hablar que es una facha... Ahora es un buen momento para aligerar un poco la dieta antes de que llegue Carnaval y nos pongan a cocinar y comer cocido (con sus correspondientes postres).

     El blog, ya os he comentado, que va genial y eso me alegra enormemente. No podría ser de otra manera. Los lectores que más han aumentado son los de Estados Unidos y Rusia. Es asombroso porque esta semana me han leído más desde América que desde España, por primera vez en estos ya casi cuatro años. Todo esto me lleva a pensar que tengo que seguir trabajando, cocinando y escribiendo. No importa porque me encanta... Deciros que tal vez esta entrada sea un poco tonta, una vez pasadas las fiestas, pero me gusta que quede un resumen para consultar en diciembre del año que viene y tomar decisiones. Además, este resumen no engorda. Curiosamente, la receta más leída en el mes de diciembre ha sido la de Zamburiñas en salsa marinera que lleva más de ¡9.600 visitas! Nosotros ya hemos comenzado con las lentejas, las sopitas, la merluza y los pistos... Es decir, la comida de diario, sana y sencilla. Como siempre digo por estas fechas: estoy deseando hacer croquetas. Sin más que contaros hoy, os deseo una muy feliz tarde. GRACIAS MIL por leerme.

miércoles, 4 de enero de 2017

Filetes empanados con salsa de queso azul


     Ya os hablé en alguna ocasión de lo que hago siempre para la cena de Fin de Año. Se trata simplemente de filetes empanados que suelo hacer de solomillo de cerdo. Este año escogí pollo y, para variar, preparé una salsa de queso. Otras veces he puesto otra salsa.

     Los filetes de pollo los adobé un poco de fiesta poniéndoles nuez moscada, tomillo y un chorrito de jerez. Con esto los dejé un par de horas en la nevera. Después los empané como hago siempre. Un huevo batido con sal -no mucha- y pan rallado del que más me gusta para esto: San Barandán. Lo más aburrido es freírlos. La temperatura del aceite fuerte o medio-fuerte, según sean finos o algo gorditos. 



     La salsa de queso ya la he puesto otras veces. Montamos Nata bien fría y le añadimos entre 50-100grs de queso azul. Hasta que espesa. Se puede salar pero yo no lo hago. Se me ocurrió despistar al personal cubriéndola con unos anacardos que piqué a medias. La idea era que no supieran lo que era y al bañar los bistecs se mezclara la salsa de queso con los frutos secos. Tengo que deciros que sorprendió y gustó mucho este invento. Muchos me preguntaron que cómo la había hecho... Ya veis que no pudo ser más sencillo pero muchas veces menos es más. Sobre todo estos días de tanto comer.

      Y es que hemos comido mucho... Demasiadísimo. Ya os iré contando poco a poco porque ha habido un poco de todo. Cosas ricas y engordantes. Ya os dije que el blog genial. Más de 21.000 visitas en diciembre. Me va costar volver a la normalidad. Ha sido, sin ninguna duda, el mes de mi blog... Y yo sin tiempo casi para hacerle caso ¡Qué vida esta! 

     Para terminar, os recuerdo que hay en el blog alguna receta para hacer roscones. Cada año he ido haciendo uno con mejor o peor fortuna pero en general bastante bien. Yo voy a compartir en la página del facebook alguna de las recetas y os recuerdo la importancia de usar harina de fuerza y levadura de pan. Todavía tengo que comprarlas. Ahora sí que os dejo por unos días. Hasta después de Reyes y San Julián. Os deseo que tengáis muchos regalos y, sobre todo, muchas alegrías. Ya veremos quién ha sido bueno y quién no... Buenas tardes a todos.