Esta receta es una tontada pero muy rica. Cuando nos sobran puerros de la sopa o el cocido podemos aprovecharlos de esta manera tan sencilla. Bien escurridos, los cubrimos con varias cucharadas de nata líquida, salpimentamos y añadimos una o dos cucharadas de queso rallado. Los gratinamos y ya están listos. Es un sabor muy suave. Se pueden cocer a propósito o comprarlos de bote (más cómodo). La nata es muy distinta de la bechamel. Hay quien prefiere mil veces la bechamel, pero la nata no hay más que abrirla. A mí me gustan las dos cosas mucho. Se podría hacer una versión light con nata y queso ligeros.
Este no está muy bonito porque lo he gratinado en el micro. Para un puerro no me permito el lujo de encender el horno. ¡Qué le vamos a hacer!
Muy rico , me parece muy bien lo del microondas ,de vez en cuando tambien lo hago
ResponderEliminarEs que al precio que está la luz en España, terminaremos cocinando en un camping-gas. Gracia Tilde, un beso.
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