Translate

lunes, 27 de julio de 2015

Pudding de merluza con leche ideal




   Como sabéis, suelo utilizar nata líquida para hacer los pudines. ¿Por qué? Bueno, ya sabéis que uno se acostumbra a algo y cuesta cambiar. Además, compro la nata de marca blanca, tres paquetes de 200 ml y es muy cómodo y barato. Una amiga me dice muchas veces que la leche ideal engorda menos. También lo dicen en el anuncio de leche ideal. Conclusión: probé a hacer el pudding (o pudin) para ver qué tal. La diferencia yo no sé si en el sabor es mucha porque tendríamos que tomar uno y otro, hechos exactamente igual, para notarlo. El resultado fue un pudin -lo voy a escribir así que es más cómodo- muy rico y tan sencillo de hacer como el otro.

   Si me leéis de vez en cuando, sabréis a estas alturas que varío pequeñas cosas en mis recetas. En la del pudin de pescado, en concreto, pues a veces pongo zanahorias, espinacas, unas gambitas,... cambio el tipo de pescado,... Pero todos salen ricos. Os lo prometo.

   Ingredientes:
200 ml de leche evaporada
4-6 huevos
Salsa de tomate
600 grs de merluza sin espinas ni piel
6 palitos de cangrejo


   Bueno, hacemos como siempre. Descongelamos la merluza toda la noche, salvo que la uséis fresca. Yo os aconsejo comprar un paquete de merluza sin piel ni espinas, es lo más cómodo y económico. La hacemos en el micro en un pirex tapado con film alrededor de 6-7 minutos. No hace falta que se haga mucho. Si ponéis medio kilo de merluza, pues 4 huevos, si es casi el kilo, 6 huevos... Un poco "de aquella manera". Una vez hecha la deshacéis en lascas con un tenedor. No la desmiguéis mucho. Salamos ligeramente.


   También necesitamos tomate frito. Puede ser de bote. Queda muy bien para el pudin. Entre 100 y 200 ml. Esto es una cuestión de gustos. En casa prefieren con menos tomate. Queda más blanquito. Con más tomate el resultado es un pudin rosado de sabor algo más ¿intenso? A mí me gusta de las dos maneras. Quizás algo más fino el clarito.

   En esta ocasión hice el tomate porque tenía algo menos media lata empezada en la nevera que me había sobrado de un pisto de berenjenas (no me gusta ponerle mucho tomate al pisto). Hice lo de siempre: doré media cebolla, incorporé el tomate, dos cucharaditas de azúcar, sal y pimienta, una pizca de tomillo y, por ser receta de pescado, una hojita de laurel. Unos veinte minutos y listo.


   Este tomate (lo podéis batir o no, retiráis el laurel) lo incorporamos al pescado con seis palitos de cangrejo picaditos, la leche ideal y los huevos batidos con una pizca de sal. Yo puse 4 huevos. Si ponemos más huevos el pudin queda más compacto. A mí me gusta que se vea más como un "paté". Eso también es al gusto. 


   Engrasamos una fuente tipo "cake" y la espolvoreamos con pan rallado. llevamos al horno a 180º alrededor de una hora. Esto es siempre igual. Ahora voy a repasar la receta a ver si he olvidado algo... Bueno, el tema de la sal. He salado el pescado, la salsa y los huevos... ¿Salamos más? Si sois sosos ya bastaría. Si sois salerosos, una pizca de sal en la mezcla del pudin y removéis bien. Pero no os paséis, cada cosa en su medida. La comida muy salada no es agradable. 


   Para acompañarlo he hecho una salsa estilo tártaro pero aprisa y corriendo. A media taza de mayonesa ligera le he añadido una pizca de mostaza, una cucharada de cebolla picadita y cuatro pepinillos cortados en cuadraditos. Vamos, una tontada. Se puede aligerar con yogur natural pero yo la he dejado así. También le va la salsa rosa. 


   Unas patatitas cocidas, un poco de ensalada y ya tenemos otra comida lista. Aquí tienen la manía de comer todos los días. Sé que es un poco rollo contar otra vez todo el pudin pero lo hago para que no tengáis que andar buscando en otras entradas. La cuestión era cambiar la nata por la leche ideal. Claro, podría haber puesto una foto y deciros: Pues nada, lo hacéis igual que los otros cambiando la nata líquida por leche ideal. Ese sería el resumen de todo este lío. La conclusión es que tiene, al parecer, menos calorías pues la leche ideal es simplemente leche evaporada. Para mí hija estaba más rico que nunca. A mí es que me gustan todos. Para los pudines de pescado soy facilona (mientras no tengan espinas). Ahora creo que sí acabe. Os animo a hacerlo y probarlo bien frío. Para un día de fiesta es bárbaro porque se puede hacer de víspera. Buenos días a todos.
   

2 comentarios: