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sábado, 31 de diciembre de 2016

Feliz Año 2017


     Queridos amigos, un minuto para desearos a todos un muy feliz año 2017. Parece mentira cómo pasa el tiempo. No creo que por la tarde tenga un momento de poner ninguna receta ni pincho. No me olvido nunca de este blog que me da muchas alegrías. Este mes hemos hecho el récord con más de VEINTE MIL VISITAS, llegando a un total de 460.000 desde que toda esta aventura comenzó.

     Sin vuestro interés, no habría continuado. De eso no tengo duda. Por eso os doy a todos los lectores las gracias. A los de lejos y a los de cerca, a los que conozco y a los que quizás nunca llegaré a conocer. GRACIAS MIL. Os deseo a todos todo lo mejor para este año nuevo que comienza en unas horas. Dios os bendiga.


FELIZ AÑO NUEVO

     Me quedaba por decir... la foto de la entrada es la pularda de Navidad de este año pero esa, es otra historia que os contaré en breve. 

miércoles, 28 de diciembre de 2016

Pasta de pollo al curry



     Quería poner alguna sugerencia para hacer sándwiches o canapés para Fin de año. A la hora de la verdad... pues no he tenido muchas ocasiones para hacerlos estos días. Ya sabéis que hay que aprovechar sobras. Hoy me acordé de una pasta de relleno que me encanta y procuré hacer algo parecido. No me ha salido igual pero sí muy rica. Eso han opinado mis hijos. Es una buena forma de aprovechar pollo cocido o asado que haya sobrado de estos últimos días. 

     Lo que necesitamos es

Una pechuga de pollo cocida
Dos o tres cucharadas de mayonesa
Dos o tres cucharadas de queso cremoso
Media cucharada de curry

     Picamos el pollo en trocitos chicos con un cuchillo y mezclamos en un cuenco todos los ingredientes hasta conseguir una pasta untuosa. Se prueba por si queremos poner algo de sal o más curry. Utilizamos la pasta para relleno de sándwiches o para hacer canapés. Os propongo los dos supuestos: Unos sándwiches cortados con moldes de galletas (ya sé que se desperdicia algo de pan pero quedan muy monos) y unos canapés adornados con un trocito de dátil. 


     Son dos propuestas sencillas. Nosotros solemos celebrar el Fin de Año con un picoteo que nos ahorra poner una mesa complicada y la posterior recogida. Resulta muy rico y variado y a los jóvenes les entusiasma. Por el momento os dejo, ando algo liada. Os deseo a todos muy buenas tardes. 
  

sábado, 24 de diciembre de 2016

Mi felicitación navideña


     Queridos amigos, no quería dejar pasar este día sin felicitaros las fiestas. Es una noche especial para estar con la familia y recordar lo que nos une. La comida... pues no tiene tanta importancia. Es agradable que sea rica, que la mesa esté bien puesta, que todo salga bien,... Claro que sí, pero si no hay una gran cantidad de cariño detrás, de nada vale. Hay que buscar un equilibrio para que los cocineros no estén exhaustos a la hora de sentarse a la mesa y pensar también en ajustarse a un presupuesto razonable a las circunstancias de cada cual. Vuelvo a repetir que no importa tanto. 

     Nosotros repetimos casi lo mismo del año pasado: consomé y pularda. Lo único que vamos a variar es que no habrá langostinos y haremos unas vieiras. En cuanto a guarniciones y esas cosas, sabemos lo que nos gusta y hay unanimidad. Ni pactos ni abstenciones. 



     Este año no haré el brownie ni la casita de galletas. Ha salido así... La verdad, me da igual. No dejan de ser tontadas. Sólo me queda desearos una muy FELIZ NAVIDAD y toda clase de bendiciones. Disfrutad de la familia, es lo mejor que tenemos. Este humilde blog sigue marchando muy bien y estos últimos días ha tenido miles de visitas. No exagero. Os agradezco que me sigáis, me leáis y confiéis en mi experiencia "cocineril" que, a fin de cuentas, sólo es una loca afición que me divierte mucho. Eso sí, todo está hecho con mucho cariño; Lo cocinado y lo escrito. Os mando a todos miles de abrazos. 

jueves, 22 de diciembre de 2016

Carrilleras a la naranja


     ¡Por fin puedo publicar! Llevaba unos días algo preocupada por mi blog pero algunas veces hay obligaciones que nos alejan de nuestras aficiones. Hoy, mañana será imposible, tengo un rato para poner una receta... Es una receta sencilla para cualquier domingo, por ejemplo, pero que podemos vestir de fiesta si nos gustan los guisos. Estas carrilleras son de Coren y salen muy ricas. No es la primera vez que las pongo en el blog pero sí hechas con zumo de naranja. Lo que necesitamos es sencillo:

Un paquete de carrilleras Coren
Cebollitas francesas
El zumo de una naranja grande
Dos dedos de brandy
3-4 bolas de pimienta de Jamaica
Aceite y sal

     Comenzamos sellando las carrilleras en dos cucharadas de aceite. Que cojan color por todas partes y bien doraditas. Sin quemarlas, claro. Las reservamos en una fuente y vamos dorando las cebollitas en el mismo aceite. Si os gustan más las chalotas, también valen. A mí las chalotas me encantan y me gusta ese color tirando al violeta que tienen pero las cebollitas son riquísimas. 


     Volvemos a poner las carrilleras en la tartera y ya podemos salar. Incorporamos unas bolas de pimienta. Las de Jamaica son más grandes y particularmente aromáticas. Podemos usar pimienta negra normal o una combinación de varias. Espíritu abierto. 


     Exprimimos la naranja y añadimos el zumo. Ponemos también dos dedos de brandy. Yo he usado Soberano que "es cosa de hombres". Si preferís cognac francés... Lo que vosotros queráis. 



     Lo que queda es tan fácil como dejar hervir a fuego muy suave alrededor de una hora. Las carrilleras tienen que quedar tiernas como manteca. Una cosa que iría muy bien y le daría un toque más festivo: unas ciruelas pasas a cocer por en medio. Hacen una salsa agridulce maravillosa. Y a partir de ahí: unas patatitas fritas, una guarnición de setas,... Lo que a cada uno le guste para acompañar una carne guisada de forma tradicional pero realmente sabrosa y delicada.
     
     Las carrilleras no son un producto ni muy caro ni muy barato, no obstante, no hay que desdeñarlas pues son muy limpitas y tiernas -en algunas bodas las ponen de plato principal-. Quiero decir que con una buena presentación son realmente buenas. 


      Aquí termino por hoy. No sé si el 24 podré encender el ordenador y sentarme a escribir. Por si acaso, os deseo ya ahora una MUY FELIZ NAVIDAD. Como siempre digo: Que el Niño Dios os bendiga a todos. Yo voy a celebrar las fiestas como mejor pueda, como hacemos todos. Siempre hay a quien echar de menos pero vale más pensar en lo bueno que nos rodea. No quiero dejar de deciros que el blog continúa marchando muy bien, con muchas visitas. Todo el mundo anda pensando en comidas... Yo querría poner alguna sugerencia de canapés para Fin de Año. Espero que me sea posible. Gracias a todos por leerme y una vez más ¡Feliz Navidad! ¡Sed felices!

     

viernes, 16 de diciembre de 2016

Merluza con almejas y guisantes



     Este es un plato muy sencillo pero muy rico para un día de fiesta. Se puede hacer con rape si el presupuesto lo permite. De utilizar merluza, lo ideal es escoger toros gorditos y mejor sin espinas.

     Ingredientes:
Un kilo de merluza
Una cebolla
Una cucharada de harina
Un tazón de caldo de pescado
Un puñado de almejas
Medio tazón de guisantes 
Aceite, sal y pimienta
Vino albariño

     Vamos a pasar la merluza, ligeramente salada, por harina para freírla en aceite bien caliente de manera que se dore y no se cocine por dentro. Rápidamente. 

     En parte del aceite, no hay que pasarse de aceitosos, doramos una cebolla picada menuda hasta que se dore sin cambiar de color. Añadimos una cucharada de harina y la doramos también. Esto ya lo hacemos en una tartera grande con tapa. Con calma y a fuego suave. Incorporamos un tazón de caldo de pescado, una copita de vino blanco y dejamos hervir hasta que espese. Salpimentamos.

     Por último, ponemos en la tartera la merluza, las almejas y los guisantes. Tapamos y dejamos hervir a fuego medio hasta que las almejas se abran. 

     Por supuesto, se pueden poner también unos gambones. Para acompañar quizás lo mejor sean unos cachelos -patatas cocidas-. Otra opción es freír un par de patatas en cuadrados y añadirlas al guiso en el momento de servir. Un puñadito de perejil le va muy bien. Que no se me olvide... una pizca de azafrán -o colorante- le dan un toque cálido muy agradable.

     Es una receta sencilla pero queda muy rica. Además la elaboración es fácil si tenemos el caldo preparado y, si no, podemos usar caldo de brick. Para hacer "trampas" siempre hay tiempo. El blog está teniendo estos días muchísimas visitas. Estoy muy contenta y agradecida. Os deseo a todos un muy feliz fin de semana. Ya queda un suspiro para Navidad.
    

martes, 13 de diciembre de 2016

Patatas con chorizo



     Yo no sé si estas patatas se podrían llamar "a la riojana" porque no he consultado la receta y les he hecho como Dios me ha dado a entender y aprovechando algún resto. Iba a hacer merluza a la romana y decidí preparar esto de primero sobre la marcha. Es lo que me suele pasar, que improviso. Bien, al margen de que la foto está bastante fachosa, el guiso estaba realmente bueno. Mis hijos se quedaron encantados. Os voy a poner ya los ingredientes:

Una cebolla
Un chorizo
Un pimiento del piquillo
Media taza de salsa de tomate casera
Cuatro patatas grandecitas
Una cucharadita de pimentón de la Vera
Una guindilla
Una hoja de laurel
Dos cucharadas de aceite
Agua y sal 

     Comenzamos picando la cebolla más bien menuda y la ponemos a dorar en una tartera con dos cucharadas de aceite. No precisa mucho. Añadimos el chorizo y un pimiento picado -vienen en un bote y los demás los aprovechamos para otra receta-.

      Pelamos y cortamos las patatas en trozos más bien pequeños. Las ponemos en la tartera y damos unas vueltas; incorporamos el pimentón de la Vera y separamos del fuego para que no se nos queme. Añadimos también la salsa de tomate. Ya podemos incorporar el agua -para cubrir las patatas- y la sal. Se puede poner un trocito de pastilla de caldo en vez de sal. Es lo que yo hice y puse un tercio porque suelen ser bastante saladas. También ponemos la guindilla, en caso de que nos guste que pique el guiso un poco. ¡Ah! y la hoja de laurel. 

     Dejamos hervir a fuego suave hasta que las patatas estén cocidas. Mejor que no se deshagan en exceso. Aquí va a depender de la calidad de las patatas. Os diría que usaseis patatas gallegas pero... yo creo que en otros sitios hay patatas estupendas también. En todo caso, cuanto más ricas sean las patatas, mejor estará el guiso. Este mío quedó bárbaro y no creáis que las patatas eran de mis favoritas. 

     Es un plato contundente pero podríamos enriquecerlo, para hacerlo único, con un huevo poché para cada comensal, de manera que la yema se mezclara con el caldito del guiso que es muy rico. Yo, como ya dije, lo preparé como entrante pues hice merluza a la romana; unas ventrescas que quedan realmente jugosas. Nos encantan. Como diría Carmen: con pan saben a marisco.


   Poco queda por decir. Otro día que repita el guiso, cambio la foto porque a veces me precipito... Estos días tiene el blog muchas visitas, ya me figuro que por la cercanía de las fiestas. Os lo vuelvo a agradecer. No deja de asombrarme seguir aquí, después de casi cuatro años. Por supuesto, mientras vosotros me leáis, yo seguiré escribiendo. No sé qué me gusta más, cocinar o escribir. Lo que sí puedo deciros es que el blog me hace muy feliz. Es curioso. Os deseo a todos muy buenas tardes. 

     


viernes, 9 de diciembre de 2016

Gambones al jerez



     Tener amigos es de las cosas mejores de la vida. Yo solía hacer langostinos al horno y mi amiga Ana me dijo: Mejor haz gambones que quedan más ricos. Pues es verdad, y el precio es muy parecido. Este año hicimos, más o menos como siempre. En la despensa no quedaba brandy (una impertinencia) y usé jerez. Lo que hice fue poner en un tazón:

Un buen chorro de aceite de oliva del bueno
Un buen chorro de jerez
Ajo y perejil picados
El zumo de un limón

    Lo mezclamos bien mezclado y lo vertemos sobre los gambones que tenemos bien descongelados y echaditos en una bandeja de horno. Por encima los espolvoreamos con sal gorda de calidad. Sólo queda meterlos en el horno bien caliente entre 8-12 minutos (según sea el horno). Qué ricos quedaron. Gracias Ana. La verdad es que los gambones son una buena entrada para cualquier día de fiesta y no son demasiado caros.


     Hoy hemos llegado a una cifra redonda: 444.444 visitas y seguimos creciendo. En Navidad siempre se buscan nuevas recetas y os agradezco que me leáis en estas fechas tan señaladas. Muchas gracias a todos y buenas tardes.

sábado, 3 de diciembre de 2016

Tarta de otoño


     Esta tarta la medio inventé hace unas semanas. Se me ocurrió llamarla "tarta de otoño" porque de alguna manera hay que reconocerla y la hice en estos días. Es una tarta fácil de hacer y muy rica. Lo único, como todas las tartas, hay que tener paciencia para elaborarla. Yo no soy una persona especialmente paciente pero el reto de hacer una tarta siempre me divierte. Vamos, que si adelgazaran, las haría cada domingo. Vayamos por partes porque necesitamos:

Un bizcocho
Mermelada de frambuesas
Almíbar
Mousse de queso
12 nueces gallegas peladas
Chocolate fundido


     El bizcocho lo hacemos con:
4 huevos medianos
La mitad de peso de azúcar
Una pizca de sal
La mitad de peso en harina menos 15 grs
15grs de chocolate en polvo Valor

     No me quiero enrollar con el bizcocho genovés que hemos hecho más veces. Batimos los huevos con el azúcar y la sal. Cuando doblan su tamaño, bien espumosos, agregamos la harina tamizada a la que hemos añadido el cacao. Mezclamos bien y llevamos al horno precalentado en un molde engrasado unos 25-30 minutos a 175º. Es un bizcocho barato, sencillo y rico para tartas. 

     Cuando se enfría lo cortamos al medio y lo mojamos con almíbar. Yo no soy de mojar mucho. Para hacerlo mezclamos:

50grs de agua
50grs de azúcar
Un chorrito de kirsch

     Le damos un hervor y ya podemos mojar el bizcocho, con pincel o a cucharadas. Si queréis mojar más, hacéis el doble de almíbar. Para gustos... Rellenamos con medio bote de mermelada de frambuesas.


     Tapamos con el otro trozo, que también mojamos, y llevamos al frigorífico. Antes se decía emborrachar el bizcocho pero el alcohol se ha evaporado.

      Lo ideal sería tener un aro para montar la tarta. Yo no lo tengo y he hecho una chapuza con papel de aluminio, metiendo el bizcocho en el mismo molde. Siempre pierden algo de volumen al enfriarse. Bien el papel de aluminio va a sostener la mousse... El aro este año lo pido a los Reyes sin falta.



     Vamos con la mousse de queso y nata. Necesitamos:
200grs de nata de montar
200grs de queso tipo de untar
100grs de leche
50-100grs de azúcar
5grs de gelatina en hojas

     Bueno... La nata a la nevera y bien fría. La gelatina la ponemos en agua -puede ser de marca blanca- y vamos calentando la leche con el azúcar. Que se disuelva bien el azúcar, la leche a punto de ebullición... Cuando la gelatina esté bien hidratada la sacamos y la secamos con papel de cocina y la ponemos en la leche caliente. Que se disuelva bien. Después añadimos el queso y lo removemos bien para que quede homogéneo. El queso se resiste un poco... Esto ya está listo. Lo dejamos templar, podéis usar un termómetro de cocina o un dedo.

     Batimos la nata, bien fría hasta que está bastante firme pero sin pasarnos. Entonces, mezclamos suavemente ambas cosas, la nata batida y la mezcla anterior. Esto va sobre el bizcocho que está bien frío en la nevera. Lo ideal es que no se nos vaya por los lados; podemos apretar un poco el aluminio. Dos horitas de nevera. A continuación ponemos las nueces. 


     Escribir las recetas de tartas siempre es trabajoso. Vamos con el chocolate. A mí me gusta mucho uno que hay en Mercadona que es negro y no lleva demasiado azúcar. El que queráis... Ponemos unos 50grs a fundir con una pizca de mantequilla. Yo he utilizado una pequeña fondué de chocolate, de las de velita, que es cómoda porque se funde lentamente y no se quema si se vuelve a poner. Vamos que es una cosa sencilla. 


     El chocolate lo dejamos caer suavemente sobre la tarta, poniendo más sobre las nueces e intentando hacer hilos sobre la mousse, por las buenas o con ayuda de una cuchara. No es una obra de arte pero queda mono y rico, creo yo. Es una tarta que, con variaciones, he hecho ya dos veces y ha gustado mucho. Por eso os animo a hacerla. Me parece que si en otoño lleva nueces, la podríamos hacer también con frambuesas, fresitas, o cualquier cosa que os guste y se os ocurra en otra estación. La mousse de queso queda muy suave pero con textura y todo el conjunto es muy agradable. Hasta aquí llegamos, releeré todo para ver si he olvidado algo, que no es raro. Buenas noches a todos.