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jueves, 13 de agosto de 2020

770.000 visitas


                                             
 Aquí estoy de nuevo, queridos amigos. La primera sorpresa que me he llevado es que el blog está muy distinto desde mi punto de vista de escritora y cocinera. A ver si me arreglo. Pasa con los veranos que me resultan cada vez más raros. Éste, con los brotes, se lleva la palma. Yo salgo poco porque no resisto demasiado bien la mascarilla. Me gustaría pasar más tiempo al aire libre pero las cosas están como están. Revueltas. Para mayor complicación bloguera, no he cocinado nada del otro jueves. Gazpachos, salteados, carnes a la plancha, algún arrocito,... Vaya, que así no hay quien lleve un blog gastronómico decente. 
   Tampoco he viajado y dudo que lo vaya a hacer tal y como vamos. ¿Vacaciones? Prefiero no hablar del tema. Algunas cenas sí que hemos disfrutado. Lo que tienen las cenas es que engordan. Les estoy cogiendo una tremenda manía :D ¿Qué queda pues?  Excursiones. Poquitas pero os puedo contar que he estado en San Miguel de Bréamo, ¡qué buenos recuerdos! y también en la Torre de Andrade. Para que os hagáis una idea os voy a poner alguna foto.
   La foto de arriba del todo es la iglesia de San Miguel. Una preciosidad románica del siglo XIII. Lo estoy diciendo de memoria y espero no equivocarme. Es un sitio precioso con una zona para hacer barbacoas, mesas para comer,... Vale la pana visitarla aunque suele estar cerrada.


   Estas dos fotos son de lo que llamamos normalmente la Torre de Andrade. Supongo que sabéis que los Andrade dominaban toda la zona en que vivimos, desde Puentedeume y fueron los que mandaron construir la iglesia y el convento de San Francisco de Ferrol. Esto antes de que su suprimieran los señoríos, cuando La Pepa. Se puede subir a la torre desde el patio central y da bastante vértigo, al menos a mí, pero las vistas son increíbles. La primera ría es la de Ares y después está la de Ferrol, que apenas se vislumbra. La foto es de móvil pero vale la pena ir a ver estas maravillas. Es una edificación del siglo XV y domina desde su posición vigilante toda la comarca.


   No os he contado muy bien la excursión porque las novedades al editar me están "loqueando". Os voy a comentar ahora el título de la entrada. Estos días estivales ha llegado el blog a las 770.000 visitas. Yo me pierdo ya un poco con las cifras a las que procuro no dar mucha importancia pues, al fin y al cabo, esto es como el que escribe un libro de cocina a lo largo del tiempo. Si surge alguna receta nueva o alguna cosa digna de mención, os la cuento, pero lo importante, creo yo, es que os sea útil y el pequeño orgullo que siento por haber hecho este trabajo que nunca pensé que haría. 

   Os vuelvo a dar las gracias por leerme y por vuestra confianza. No sé lo que será de todo esto en otoño. ¿Quién lo sabe? Yo procuraré seguir por aquí, y con más atención si las cosas se ponen feas, como lo estuvieron en primavera. Esperemos que no... De momento, yo me dispongo a ir pasando agosto de la mejor manera posible, que no sé cuál es. A ver si en unos días subo alguna receta rica que esto está siendo un desastre. Bicos a todos. 

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