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miércoles, 30 de julio de 2014

Arroz de churrasco



     Cada vez que sobra carne mi marido dice: "Haz un arroz". Da igual que sea pollo u otro tipo de carne. Hace unas semanas nos habían sobrado unas tiras de costilla asada y un chorizo criollo. Al día siguiente tocó hacer el consabido arroz. Como he puesto tantos arroces no hay mucho que explicar. 

     Separé toda la carne del hueso, un poco rollo, y la corté en trocitos; lo mismo hice con el chorizo. En la tartera doré las hortalizas e incorporé las carnes dando unas vueltas para que tomaran color. No puse mucho aceite porque el cerdo es grasito. 

     Lo siguiente: Un tazón de arroz y unas vueltas a fuego medio, que la grasa lo rodee para que quede bien suelto. Y ya, añadimos el doble de líquido, ya sea agua o caldo. Si es agua, por supuesto tenemos que salar. Un poquito de colorante o azafrán, media taza de guisantes y a cocer todo junto unos 18 minutos a fuego suave (los guisantes los últimos 5 minutos). Lo mismo de siempre. 

     Bueno, pues quedó un arroz muy rico, nada fuerte (que era mi miedo) y muy sabroso. En fin... que casi siempre podemos hacer algo con las sobras y tirarlas es lo último.

     En cuanto a las hortalizas que utilicé: Pimiento, cebolla, ajos,... Lo que tenía en la nevera. No suelo poner cebolla en los arroces pero en este caso, suaviza un poco al cerdo porque la cebolla cocinada es dulce. Bueno, pues es sólo una idea, por si os sirve de algo. Buenos días. 


lunes, 28 de julio de 2014

Pastel de chocolate negro



     Ya os imaginaréis que este pastel se hace igual que el de chocolate blanco. Aquel nos encanta pero este también está muy rico. También sabéis que son parte del pastel de tres chocolates que yo no suelo hacer por grande. Sin embargo, hacer uno solo es cosa de diez minutos y la medida, para mi casa, es estupenda. Aunque me imagino que todos conocéis como se hace, por si alguno se despista, lo explico rápidamente.

    Ingredientes:
100 grs de chocolate negro
50-75 grs de azúcar (al gusto)
200 ml de nata
300 ml de leche
Una cucharada de oporto y otra de café
Un sobre de cuajada
Galletas tipo chiquilín o las que os gusten

     Pues ya sabéis, reservamos 50 ml de leche para disolver la cuajada. En el resto de la leche ponemos el chocolate a fuego medio removiendo hasta que se disuelve por completo. Añadimos la nata, el azúcar, el café y el oporto. Probamos una puntita para ver si nos gusta de azúcar o queremos más (el chocolate negro es amargo). Disolvemos bien la cuajada en la leche restante y añadimos parte de la mezcla caliente. Volvemos a poner en la cazuela pasando por  un colador. Esto es importante porque puede quedar algún grumo y es una facha. Una vez todo junto, revolvemos bien y subimos el fuego hasta que hierve un minuto. Tiene que hervir. Ya está listo para pasar al molde de silicona que escojáis. Si se pega un poco al fondo de la cazuela, no lo despeguéis: podría saber un poco a quemado. Lo que se pega a la cazuela allí se queda (y esto vale también para la bechamel). 

     Escogéis unas galletas que os gusten y encajen con el molde. Es más fácil si es de cake. Yo suelo poner las de tipo "relieve" o Chiquilín (relieve es la marca blanca y la hay en todos los supermercados, son muy ricas). Ponemos las galletas sobre la mezcla, ya en el molde, cuando todavía está caliente para que se ablanden un poco. Dejamos enfriar y pasamos a la nevera unas horitas. Que se cuaje y se enfríe bien. Esta tontada es un pastel la mar de rico y nada pesado (engorda lo suyo). Y claro, podéis hacerlo de dos o tres chocolates, versión completa. Ya sabéis que con la cuajada se hacen postres muy fáciles y ricos. Pues nada más. Listo el postre, que sale del molde de silicona perfectamente. Feliz semana. Ya va medio verano...

viernes, 25 de julio de 2014

Ensalada de pasta




     Hoy, día de Santiago, os pongo una ensalada de pasta. A mí no me encantan las ensaladas con pasta pero a mi familia sí. Por eso, no la hago demasiado. Por supuesto, los ingredientes se pueden variar pero os pongo los que uso normalmente.

     Ingredientes:
250 grs de pasta de colores
Aceitunas
Queso en dados
Bonito en aceite
Zanahoria rallada
Tomates cherry
Maíz dulce
Aceite, sal y vinagre
Mahonesa

     Lo primero, claro, es cocer la pasta al dente y enfriarla debajo del grifo. Podéis escoger la que más os guste, más grande o pequeña. Yo creo que vale la pena ponerla de colores porque luce mucho más. Un bonito de buena calidad también ayuda a que esté rica. Los daditos de queso los podéis comprar o hacerlos en casa. Hay unos en Mercadona de dos colores que son muy ricos. Y las aceitunas sin hueso... Bueno, mezclamos todos los ingredientes y aliñamos. A mí me gusta añadir unas cucharadas de mahonesa. 

     Es una ensalada muy sencilla y fácil de hacer. Incluso podéis comprar la zanahoria rallada que venden en Mercadona. Es muy cómoda. Las cantidades al gusto y si preferís unas colas de langostinos, adelante. Algunas veces le pongo un par de huevos duros picados. También me gustan las alcaparras pero en casa no son partidarios. Las cantidades al gusto. 

     Nada más. Feliz día del Patrón a todos. Hay que celebrarlo.

miércoles, 23 de julio de 2014

Huevos con jamón y guisantes



     Pues yo sigo con mi cruzada ligera. Estos huevos en sartén están inspirados en un molde de huevos que suele hacer mi madre pero en formato individual y a la plancha. Otras veces los he hecho en el micro. En una sartén pintada de aceite ponemos dos huevos, una cucharadita de jamón serrano magro y otra de guisantes (cocidos en el micro unos segundos), sal y pimienta. Ponemos al fuego, no muy fuerte y tapamos 3-4 minutos, hasta que vemos que la clara se ha cuajado con el vapor. Muy sencillo y la mar de rico.



     Lo bueno, para mi gusto es que las yemas no se cuajen del todo, como veis en la foto. En este caso el acompañamiento es una ensalada de tomates cherry de colores con un poco de remolacha y pan integral. Bueno, es sólo una idea para una comida ligera al minuto. Me ha parecido muy agradable y ¡tan fácil! 



     Los tomates de colores, como veis, son una monada. Para mí los más sabrosos son los naranjas alargados pero los kumatos son divinos. No siempre los encuentro pero adornan cualquier plato con ese colorido. Nada más que decir. Hace un día precioso y un calor tremendo. A ver qué se me ocurre hacer hoy: bueno, rico, barato y ligero... ¡Buenos días!


lunes, 21 de julio de 2014

Algunas tonterías



     Bueno, he tenido mucho que hacer esta mañana y me ha faltado tiempo para publicar. Por eso os pongo unos aperitivos un poco tontos que he hecho y andaban por el archivo. El primero es un pincho de queso de cabra con champiñones al ajillo y cebolla caramelizada. En vez de palillo (que no se estila) un pincho de "no sé qué" (que sí se usa). A mí esto me parece una tontada.



     Este pan con camembert, que ya os lo he puesto alguna vez. Lo hice hace unos días y me salió muy rústico. Pero estaba muy bueno. Sorprende la miga tan rica y el queso totalmente fundido. Vale la pena probar a hacerlo porque es realmente fácil.



     "Los Señores Huevos", así con mayúsculas. Les encantan a los niños. con su cama de bechamel, su capita de jamón y la aceituna por cabeza. Sólo hay que cortar el sombrerito y darles la vuelta. Aquí sí que hay que usar palillos...




     Y este pincho, algo borroso, que hice con mantequilla, mermelada de berenjena y algunos productos de Cartagena. Muy rico y original. 

     Pues aquí os dejo estas "tonterías" por si os dan alguna idea para una comida, cena informal o aperitivo. Ya sabéis que en verano de eso hay mucho.

viernes, 18 de julio de 2014

Crema de calabacines al pimiento



     Buenos días, otra vez aquí. Hoy os traigo una crema muy ligerita y que nos ha gustado mucho. Es una buena cosa porque todos me han pedido que haga más cremas de este estilo y a mí me viene muy bien hacer platos "light". Lo de ponerle pimiento se me ocurrió por el color y quedó muy rica. Sabe un pelín a pimiento  pero nada descarado. Vamos que preguntaron: "¿De que es? Está muy rica". A ver qué os parece...

     Ingredientes:
Una cebolla grandota
Un pimiento de freír grandecito
Un kilo de calabacines
Tres cucharadas de aceite de oliva
Sal y pimienta, una pastilla de caldo
Un litro de agua



       Lo primero que hacemos es pochar la cebolla y el pimiento cortados como queráis porque los vamos a batir. Que no se doren. Pelamos los calabacines sin pasarnos, que quede algo de verde. Bien lavados y cortados los pasamos a la tartera. Salpimentamos y dejamos que se pochen también un poco. Añadimos el agua, un litro, y la pastilla de caldo. Llevamos a ebullición y dejamos cocer a fuego suave unos 15 minutos. Que veáis que están cocidos los calabacines pero no los matéis. Queremos un verde alegre y suave (no el tono apagado de las hortalizas recocidas). Si os gusta, podéis añadir un poco de nuez moscada.

     Ya está listo para batir. Lo mejor es una batidora de vaso. Un par de minutos a potencia máxima hasta que quede perfectamente homogéneo (me fastidian las cremas mal batidas). Ya veréis que verde tan bonito. A todos nos ha gustado. Y, claro, si preferís, no le ponéis el pimiento pero le da un toque original de sabor. 



     De segundo cualquier cosa. Si estáis a dieta ¡paciencia! Las patatas fritas para la familia. Mejor no mirarlas.



     De la excursión del miércoles os pongo una foto pues no hice apenas y salieron mal. Deciros que adivinéis es un poco tonto. Está hecha en Aguete, en las Rías Bajas. Un sitio precioso y un día estupendo. Nos vemos el lunes.


lunes, 14 de julio de 2014

Ensaladilla rusa




    Me encanta la ensaladilla rusa casera. También la que hacen en los bares que, no sé porqué, suele ser riquísima. La que hacemos con la bolsa de congelados puede salir rica si la "adornamos" un poco pero la calidad de las patatas deja mucho que desear. También, a mi modo de ver, es por cocerlas en cuadraditos. Con los años he llegado a la conclusión de que es mejor cocer patatas y zanahorias enteras. No dan esa sensación de aguadas y conservan todo su sabor.

     Ingredientes:
Medio kilo de patatas
Dos zanahorias grandes
Una taza de guisantes congelados
Aceitunas
Una lata grandecita de atún de buena calidad
Un huevo duro por comensal
Mayonesa
Una cucharada de cebolla picadita
Remolacha (opcinal)





     Lo primero que hacemos es pelar zanahorias y patatas y cocerlas unos 25 minutos, hasta que están hechas (se puede pinchar para comprobar con un cuchillo pequeño). Mejor que las patatas sean de tamaño similar para que tarden lo mismo. Escurrimos, enfriamos y cortamos en cuadraditos. Cocemos también los guisantes, podemos hacerlo en el micro o, al final, cinco minutos con las hortalizas. Aparte, cocemos los huevos, unos 12 minutos.

     Ya sabéis que tenemos que mezclar todo, simplemente, añadir la mayonesa, la cebollita,... Los huevos se pueden poner dentro o de adorno en mitades. Depende del gusto. También hay quien le añade pimiento morrón de lata. La remolacha me encanta por el color que le da. Ya sabéis que es dulzona y a los niños no suele gustarles. Una opción es ponerla aparte, con sal y aceite de oliva virgen, y que la añada quien quiera. Simplemente con escamas y aceite es deliciosa. Y con ese maravilloso color que tiene... Sólo por eso ya vale la pena.

     Pues esta es la receta básica y si he olvidado algo me lo decís. ¡Las aceitunas! Bueno, claro, que no tengan hueso que se puede uno romper una muela. A mí, para la ensaladilla me gustan normales pero hay quien las escoge rellenas de anchoas o pimiento. Ya sabéis, las que os gusten. También se pueden adornar con puntas de espárragos, la clara y la yema de un par de huevos duros picadas por separado,... Lo que os guste y os de la gana. Y no he dicho nada de la mayonesa. En verano suelo usarla de bote. Si es para llevar a algún sitio, ni lo dudo. La casera es riquísima pero con mucha precaución. 



   El miércoles, día del Carmen, no estaré. Supongo que no publicaré hasta el viernes, pero si puedo poneros alguna foto de la "excursión", lo haré. No tengo inconveniente. Ya hemos llegado a 170.000 visitas y os lo agradezco mucho (aunque vayamos más despacito). Feliz comienzo de semana a todos.



viernes, 11 de julio de 2014

Quiche de calabacines y queso



     Una quiche un poco distinta. Decidí hacer una masa casera con royal para no utilizar demasiada mantequilla en una masa quebrada que supongo que engorda mucho más (a mí me encanta). Es la masa que hice para la empanada de lacón asado. Os la voy a escribir para que no tengáis que ir a buscarla:

     En una taza ponemos leche, casi hasta arriba menos un dedo de aceite de oliva. Esto es lo líquido. En un bol, vertemos el líquido, una cucharilla de sal, una cucharadita de azúcar y dos cucharillas colmadas de levadura royal. Después vamos añadiendo harina hasta formar una bola. Alrededor de 325 grs. Pasamos a la encimera y amasamos unos minutos. Dejamos reposar mientras preparamos el relleno de la quiche, empanada o lo que quiera que vayamos a hacer. 

     Continuamos con el relleno: Pelamos y rallamos dos calabacines medianos. La idea de rallarlos la he sacado del Blog de Rosana Fraga, LAUREL Y TOMILLO. Un blog maravilloso que debéis visitar. Una vez rallados, los pasamos a la sartén con dos cucharadas de aceite. ¿Por qué pocharlos? Pues porque el calabacín tiende a soltar mucha agua y así la evaporamos para que no se nos quede la quiche llena de charquitos. 

     (A la izquierda veis el postre a enfriar antes de ir a la nevera: Unas natillas caseras muy ricas. Lo bueno de las natillas es que son baratas y fáciles de hacer y gustan a todos)




     Me estoy liando. Seguimos con el relleno. Dejamos que se enfríen un poco los calabacines. Batimos dos huevos, los mezclamos con 50 grs de mozzarella y 50 de queso filadelfia o similar. Sal, pimienta y nuez moscada. Estos quesos son suaves. Era lo que me apetecía pero podéis poner un queso más contundente de sabor. Eso para gustos. Yo creo que quedó muy fina.



     Y, como siempre, estiramos la masa, colocamos el relleno y llevamos al horno a 200º unos 40 minutos. Vigilándola, claro, que cada horno es de su padre y de su madre. Veis que la masa, con el royal, hace algo de miga. A mí me gustó mucho, a todos en general. Por supuesto, podéis hacerla con masa quebrada o de hojaldre. Y esta es la entrada del viernes. Feliz fin de semana a todos.


miércoles, 9 de julio de 2014

Dos guisos de pollo y unos scones con anís





    Esta comida la hice hace varios días y me encantó. Había comprado un pollo de Coren, de esos enormes, y me puse a guisarlo con tomate, cebolla,... y algunas especias. Todo muy normal pero me di cuenta de que no cabía en la tartera. Entonces decidí dividir y pasar las patas (que es lo que me gusta a mí) a una tartera más pequeña y hacerlo un poco distinto. Por eso dos guisos.

     Por otro lado me puse a hacer unos scones y se me ocurrió añadirles una cucharilla de anís en grano. Que ricos estaban. Ya sabéis que los scones apenas se amasan y se cortan. Ya lo veis en la foto de abajo. Es una masa que se hace con royal baking powder (ver "Scones"). A mí me encantan por su inmediatez aunque reconozco que son más de merienda.





     Los scones los hacemos al horno 12-15 minutos a unos 200º. Estos con anís quedaron muy originales. Otro día los repetiré y os los explico mejor. Son muy ricos.



     El pollo lo doré, después le añadí tomate y cebolla en "gajos. También un pimiento en tiras y dos dientes de ajo, y lo guisé con romero, tomillo, una hoja de laurel y un chorro de jerez. Este, en plan español. Muy clásico y muy rico. Con las típicas patatas fritas añadidas al final. A todos les gustó mucho.




     El otro guiso. Pues separado antes de especiarlo, en otra tartera, le añadí: cominos, canela (una pizca) y pimentón. Además un buen puñado de pasas que se hincharon y quedaron deliciosas (y medio vaso de agua). Cociendo lentamente para que no se rompan las pasas. El pollo ha de estar totalmente hecho, hasta que se separa del hueso. Este de Coren tarda lo suyo pero es muy rico.




     Después les pregunté cuál les había gustado más y todos dijeron que un poco más el moruno con pasas pero los dos muy ricos. Los panecillos también les encantaron.




     Y tomamos también ensalada de lechuga y pepino. Caseros ambos. Qué rica estaba. Qué bueno cuando te regalan los amigos productos de su huerta. Siempre saben más y suelen ser más frescos. Pues ya veis que he estado fuera pocos días y he hecho algunas canfurnadas, ya iré poniendo más. Y, claro, se parecen a otras cosas que ya he hecho, pero espero que os gusten. 



     Y como siempre, os pongo el aspecto de la miga de los scones de anís. Es una miga muy rica, casi "panera" y veis alguno de los granos de anís. No puse demasiados por si acaso. Estas comidas, con panecillos y estas cosas, me divierte mucho hacerlas. Ya lo sabéis, me encanta hacer panes. Pues nada más, aquí queda.

sábado, 5 de julio de 2014

El verano



     El verano ha llegado aunque en Galicia no acaba de quedarse. No obstante, siempre surge algo distinto y cambiamos nuestra rutina. Afortunadamente. Si escribo hoy es para deciros que estaré fuera varios días y el lunes no publicaré. Ya supongo que en verano habrá días que me será imposible pero espero, al menos, poder publicar una vez por semana. El año pasado el blog bajo mucho durante el verano y me dio un poco de pena pero es algo que hay que asumir: En verano se cocina menos, se sale más y se tiene menos tiempo para perder en internet. La cosa es seguir poco a poco y no perder la ilusión. 

     Me animan mucho las amigas a seguir y me dicen que les gusta más como escribo y cuento las recetas que las fotos en sí (por un lado no me extraña porque algunas fotos me salen fatal). Esto me sorprendió al principio pero también me gusta que me lo digan. Es una forma de saber lo que más interesa. La explicación y algunas tonterías que pongo por en medio para intentar que sean más divertidas. Procuro hacerlo bien, no poner faltas, ser ordenada y lógica,... En este sentido, mis amigas son estupendas, me ayudan mucho con sus críticas que siempre son positivas. Las fotos, ya sé que no siempre salen bien pero daros cuenta de que es la hora de comer, la mesa puesta, todos esperando,... Y yo saco el móvil y me pongo a ello. Un lío esto de "quitar" las fotos, que decimos en Ferrol. 

     Por lo demás, desearos feliz verano y vacaciones a los que las disfrutéis. A los autónomos: paciencia. Cuidaos y no os queméis al sol. Disfrutad de la familia y de los amigos. Feliz verano.

viernes, 4 de julio de 2014

Cachopos



     Los cachopos son unos filetes rellenos típicos de Asturias. Estos los hizo mi marido con ternera gallega y estaban de llorar de ricos. Yo ya los había tomado algunas veces pero no los llamaba así. Se rellenan de jamón serrano y queso. Se puede escoger el queso que más os guste, uno de barra normal o alguno tipo: cheddar, edam, emmental,... Tanto la carne como el jamón deben estar cortados finos. Se montan, se salpimentan y se pasan por harina-huevo-pan rallado. Por este orden. Conviene darles unas palmadas para que suelten el exceso de pan rallado que sólo sirve para mancharnos el aceite de la sartén. 

    Lo complicado es hacerlos muy grandes, por lo visto en Asturias los restaurantes compiten en este sentido, ya que son difíciles de manejar. Uno mediano ya cuesta tomárselo entero. Después se fríen y claro, si son inmensos, en casa no hay sartén bastante grande... Un lío.




     Por eso, al final, le dije a mi marido que no los hiciera tan grandes. Veis en estas fotos el jamoncito rosado, el queso que se escapa (él puso el jamón entre dos lonchas de queso). Es una delicia. Yo creo que es mejor hacerlos de ternera porque, si queda algo rosada por dentro, no tiene importancia. El cerdo y el pollo medio hechos son un asco. Y bueno, os aconsejo hacerlos pues
 son riquísimos. Yo ese día sólo cené un vaso de leche pero ¿no dicen que debemos comer como reyes y cenar como mendigos?




     Aquí os dejo la foto de uno de los grandes que hizo. Los jóvenes se lo pueden tomar pero para nosotros medio fue más que suficiente. Se suelen tomar con patatas fritas gallegas. Nosotros ese día tomamos una ensaladilla rusa casera que también hizo y veis en la primera foto, montada con ruedas de remolacha. Estaba exquisita. Y aquí se acaba esta entrada. Feliz fin de semana.



miércoles, 2 de julio de 2014

Sopa ligera de tomate y pimiento



     Parece que vuelve el sol después de una semana de lluvias... ¡Otra vez a cuidarse! Esta cremita no es que sea la gran maravilla pero es muy agradable. Un paso antes de la sopa "milagrosa" de apio y repollo. Muy fácil de hacer y ligerita.

     Ingredientes:
Una cebolla grandota
Un pimiento de freír grande
Una lata pequeña de tomate triturado
Dos cucharadas de aceite, una pizca de sal
agua y una pastilla de caldo

     La cebolla no la incluyo en el título pero la suelo poner en todas las cremas de verduras y hortalizas. Me parece que les aporta finura y sabor... Aunque en la tele digan lo contrario. Lo primero que hago es pochar cebolla y pimiento en el aceite a fuego medio con la pizca de sal. Cuando están blanditos, incorporo la lata de tomate y dejo hervir lentamente unos 15 minutos. Cuidado con el tomate que le encanta salpicar. Transcurrido ese tiempo añadimos el agua, la  medida de dos latas de tomate para esta cantidad. También ponemos la pastilla de caldo de pollo. Dejamos que pasen unos 10-12 minutos a fuego lento y apagamos. Ya podemos batir. Que quede una crema bien fina. Podemos tomarla tal cual o adornarla con lo que os guste y os parezca bien. Yo he puesto el espárrago porque era lo que tenía a mano. Muy rica con tostadas de pan con ajo y aceite pero me temo que esta opción no es ligera.

     Se puede tener en la nevera varios días y, si la tomamos de entrante, nos llenará un poco aportando muy pocas calorías.